Relajación

La relajación es el descanso del cuerpo y de la mente, relajarse es soltar y aflojar el cuerpo y serenar la mente o sea no ponerse a pensar en nada, lo contrario de relajación es tensión.

En sánscrito se llama savasana o postura del cadáver. Parece engañosamente simple, pero en realidad es una de las posturas más difícil de hacer bien, además de que cambia y evoluciona con la práctica. Al final de una clase, la relajación será mucho mejor que al comienzo, porque las diferentes posturas realizadas en la clase habrán estirado y relajado progresivamente los músculos. Relajarse no es quedarse dormido.

Cuando comienza la relajación es frecuente que a los pocos minutos de permanecerer en la posición indicada, se sienta una imperiosa necesidad de moverse, esta necesidad, que es psicológica y no física, conviene resistirla y dominarla hasta que desaparezca, no obstante, si antes se ha hecho suficiente ejercicio, esta necesidad de moverse no se presentará, entonces, el descanso es la continuación natural del ejercicio.

La relajación no es un estado sino un proceso.
Una serie de niveles de profundidad creciente, es cuestión de dejarse ir, de no hacer nada, más bien que de hacer.

A medida que se relaje todo el cuerpo y la respiración se vuelva lenta se producirán ciertos cambios fisiológicos:

Disminuye el consumo de oxígeno y se elimina menos anhídrido carbónico, la tensión muscular se reduce y se observa una disminución en la actividad del sistema nervioso, incluso unos pocos minutos de relajación profunda reducirán más eficazmente la preocupación y la fatiga que muchas horas de sueño intranquilo.
La pérdida de energía se reduce, desaparece el stress, disminuyen el ritmo respiratorio y el cardíaco y todo el organismo descansa, cuando se logra un estado de relajación más profundo la mente se calma y se aclara.

¿Como se hace?

Acostado boca arriba como muestra la foto, ojos cerrados, piernas un poco separadas, brazos separados un poco del cuerpo, manos con las palmas orientadas hacia arriba, respiración normal por la nariz.

Mentalmente recorrer todo el cuerpo desde los pies hacia la cabeza relajando, aflojando y soltando cada músculo que esté en tensión, el cuerpo pesado se hunde en el piso, la mente está tranquila sin pensar en nada, (a veces al principio ayuda escuchar una música serena, o imaginar algún paisaje de la naturaleza) mantenerse así 5 o 10 minutos...para volver de la relajación tomar conciencia del cuerpo y de la respiración, tomar respiraciones mas profundas, mover lentamente los pies y las manos y de a poco ir moviendo todo el cuerpo, estirarse, nunca se debe volver de golpe ni tampoco incorporarse bruscamente. 

Es importante darse cuenta y tomar conciencia cuando debemos parar y regalarnos unos minutos de relajación... para recargar pilas y seguir con nuestra tarea...